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6 condiciones que no se deben pasar por alto en una cava


En muchas culturas el vino es considerado un alimento y si no se consume en el momento, se almacena, sin embargo, como todos los alimentos requiere de condiciones específicas apara conservarlo de la mejor manera. Es necesario recordar que el vino seguirá evolucionando dentro de la botella y esta evolución será buena o mala en gran medida a la forma en la que se conserve. Es por esta razón que te recordamos 6 condiciones que no se deben pasar por alto en una cava.

Guarda de vinos

1.- Espacio: Elegir el espacio destinado al almacenaje de nuestros vinos es crucial, ya que del mismo dependerá la aplicación del resto de las condiciones a seguir. Este espacio deberá estar libre de aromas contaminantes, y cuando decimos contaminantes, nos referimos a aromas intensos, penetrantes que puedan alterar los aromas del vino, por ejemplo: la cocina, la repostería, la tostadora de café, deshechos orgánicos etc. Estos aromas son tan fuertes que pueden entrar a la botella a través de la porosidad del corcho.

2.- Ventilación adecuada: Como cualquier otro espacio de almacenamiento de alimentos, la ventilación es vital para evitar la generación de humedad y el desarrollo de plagas.

3.- Humedad relativa: A diferencia de otros alimentos enlatados o en frascos, el tapón del vino (en su mayoría) es corcho, un material orgánico, elástico que es sensible a las condiciones externas. La humedad deberá encontrarse entre 65 y 75%. Por debajo de 65% de humedad, el corcho perderá su propiedad retráctil y se encogerá lo que permitirá la salida de vino y la entrada de oxígeno a través de las paredes del cuello de la botella. Por arriba de 75% de humedad permite la generación de microorganismos en esta materia orgánica y es cuando se puede encontrar vestigios de moho y hongos en la superficie del corcho. Una buena ventilación permitirá controlar la humedad.

4.- Temperatura constante: Mas allá de decirles que la temperatura ideal de guarda de los vinos se encuentra entre 12° y 14° C, que sabemos lo difícil que es mantener esta temperatura si no se cuenta con un equipo de refrigeración que lo haga de manera automática, lo más que podemos hacer es encontrar un lugar en el que no existan variaciones de temperatura, es decir espacio más fresco del lugar y que si ese lugar se encuentra a 18° C esta bien siempre y cuando sea constante; o que si este lugar tiene 10° C también es correcta mientras mantenga una constante a través del tiempo.

5.- Iluminación: La mínima iluminación posible, otro de los grandes enemigos del vino a demás de la temperatura es la luz y la luz del sol es la más peligrosa. Lo ideal sería una luz neutra que no emita calor.

6.- Vibraciones: Evitar al máximo las vibraciones es muy complicado, para empezar, la transportación del vino inevitablemente generará vibraciones. Así que no será un gran problema mientras no se encuentren a lado de las vías del tren o que su cava se encuentre junto a la maquina lava ropa. Ya que, existe la teoría de que las vibraciones constantes pueden acelerar las reacciones químicas del vino y por lo tanto precipitar su evolución.


El peor espacio para la guarda de los vinos es la cocina, a menos que se cuente con un equipo especial de para este fin como una cava climatizada, de lo contrario tendrás variaciones de temperatura, vibraciones, iluminación y diferentes niveles de humedad. Si aún así no tienes otro lugar donde guardar el vino, lo que recomendaríamos en este caso sería "no guardar los vinos por largos periodos de tiempo", es decir no más de 3 meses, después de este lapso, el vino sí que cambiará sus propiedades. Y no nos referimos a que llegue a ser dañino a la salud o que al abrirlo se encuentren con un vinagre, pero si se encontrarán con indicios de oxidación, tanto en el color como en sus aromas.

Si se respetan estas condiciones podrán conservar las características del vino por el tiempo que el mismo vino esté destinado a guardar. Es muy importante recordar que no todos los vinos son elaborados para guardarse por muchos años. De hecho, el 90% de los vinos del mundo están hechos para consumirse en sus primeros 3 años de vida, así que si guardan un vino de este estilo, por más que respeten las condiciones de guarda, después de 10 años se encontrarán con un vino decrépito.

Por eso te recomendamos leer nuestro post sobre como saber si un vino debe guardarse por muchos años o para debe consumirse joven.

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